Author/Artist: ALMAFUERTE Title: Me da pena confesarlo Album: Profeta en su tierra (1998) Transcribed by: Ricardo González Email: gaita@softhome.net INTRO: G Am D7 Em C e-|-3---------------5--------------------------------|---------- B-|-3---3-5-3-------5--------------------------------|-------1-- G-|-4---------4-----5------------4-------------4-----|-------0-- D-|-5-----------5-6-7----------7---7-5-4--7-7----7-5-|-------2-- A-|-5---------------7---7---5------------------------|-0h2h3-3-- E-|-3---------------5-----5--------------------------|---------- C# G Bm Bbm Am D7 G B Em ---------------|-7--6--5-----5---3-|-7--7-|- ---------------|-7--6--5-----7---3-|-7--8-|- ---------------|-7--6--5-----5---4-|-8--9-|- ---------------|-9--8--7-----7---5-|-9--9-|- -2h3h4-4-------|-9--8--7-----5---5-|-9--7-|- ---------0-2-3-|-7--6--5---------3-|-7----|- B nace el hombre en este mundo Em remanchao por el destino D y prosigue su camino G muy confiado del rigor. B Em Sin pensar que la inclemencia Am Em de la vida sin amor, F# va enredando su existencia B en los tiempos del dolor. Pero llega aqui un momento, Em se da cuenta de su suerte D y se amarga hasta la muerte G sin tener ya salvación. B Em Pues comprende que la vida, Am Em fue tan sólo un metejón, C al perder la fe querida B Em de su pobre corazón. D - G Am Me da pena confesarlo D7 G pero es triste, que canejo, Am el venirse tan abajo, D7 G derrotao y para viejo. Am No es de hombres lamentarse Bm Em pero al ver como me alejo, C C# G sin poderlo remediar Bm Bbm Am D7 G yo lloro sin querer llorar. Si no fuera aquel recuerdo de mi madre tan querida, me acorrala en esta vida con sentida devoción. No era yo quien aguantaba esta triste situación, y el que así te contemplaba sin abrirme el corazón. Pero hay cosas compañero, que ninguno las comprende, uno a veces se defiende del dolor para vivir. Como aquel que haciendo alarde del coraje del sufrir, no se mata de cobarde por temor de no morir. Me da pena confesarlo pero es triste, que canejo el venirse tan abajo derrotao y para viejo No es de hombres lamentarse pero al ver como me alejo sin poderlo remediar yo lloro sin querer llorar